La ortodoncia interceptiva es el nombre técnico para referirse a la ortodoncia infantil. Recibe este nombre porque pretende “interceptar” el proceso de crecimiento de los maxilares y adelantarse a los problemas de oclusión y mordida que el niño/a desarrollará cuando haya finalizado su fase de crecimiento.
Aunque con bastante frecuencia el niño necesitará un tratamiento de ortodoncia en la adolescencia, la ortodoncia interceptiva puede ser muy útil para limitar el alcance de estos problemas. Su principal objetivo es evitar o minimizar alteraciones más graves futuras así como tratamientos más caros y complejos en dentición permanente o cuando la anatomía de su cráneo se haya desarrollado por completo.
Cuando hablamos de ortodoncia fija nos referimos a la ortodoncia clásica con brackets. Es una aparatología fija que nos permite el movimiento dental hasta conseguir una oclusión estética y funcional correctas.
Los brackets, que pueden ser metálicos o estéticos, van pegados a los dientes y durante las visitas se va ajustando toda la aparatología para que se vayan moviendo hasta su correcta posición final y acabar luciendo una sonrisa bien bonita!
El tratamiento ortodóntico con alineadores transparentes es sin duda, el sistema más cómodo y sencillo de utilizar. Es una ortodoncia transparente y prácticamente invisible que utiliza unas férulas hechas a medida a través de un programa digital en 3D.
Los alineadores son férulas transparentes de quitar y poner hechos a medida, que se van cambiando cada semana aproximadamente.
Cada alineador realiza unos movimientos dentales específicos que están programados desde el inicio del tratamiento a través de un programa digital en 3D.
Los dientes se van moviendo a medida que se van cambiando los alineadores hasta conseguir que estén alineados y en la posición final planificada.